En la encuesta del mes de junio, preguntábamos a nuestros socios y socias si han aplicado objetivos de sostenibilidad ambiental en su estrategia empresarial. Y los resultados son los siguientes:
- Sí, con el propósito de cubrir las exigencias del marco normativo. (67%)
- Sí, para cumplir las exigencias del marco normativo y superarlas. (33%)
(Nadie ha contestado con un no)
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De la última encuesta realizada por parte de la UPM a empresas del metal, se deduce la alta concienciación del metal catalán sobre la importancia de incorporar a la estrategia de desarrollo de las compañías los objetivos de ser más sostenible desde el punto de vista ambiental .
Sin embargo, la mayor parte de las empresas del sector ha incorporado planes de acción y medidas ambientales para cubrir las exigencias normativas. Así lo declara el 67 por ciento de las empresas consultadas. Mientras que el 33% restante se ha marcado como propósito ir más allá de las exigencias del marco normativo en materia de sostenibilidad ambiental.
Hay que decir que entre las empresas que disponen de una hoja de ruta ambiciosa para conseguir ser más sostenibles destacan las de gran tamaño. En este colectivo cada vez hay más empresas del sector con planes que persiguen las cero emisiones, años antes de lo que ha marcado Bruselas e, incluso, con objetivos de ser “Net Positives”
En este sentido, un reciente estudio de la consultora McKinsey pone de relieve que perseguir objetivos de responsabilidad ambiental, social y de gobernanza se ve, claramente, como una oportunidad de crecimiento empresarial, sobre todo entre las grandes empresas.
Sin duda, un desafío crucial para el metal es que las compañías más pequeñas incorporen el antes posibles objetivos exigentes de sostenibilidad ambiental y desarrollen los planes necesarios para alcanzarlos. No hacerlo constituye una importante amenaza para el sector.
FUENTE: CEAM, McKinsey, UPM