Desde la Unión Patronal Metalúrgica (UPM) ya criticamos el planteamiento que se está realizando desde el Ministerio de Trabajo para reducir la jornada laboral de 40 a 38,5 horas en el presente año ya 37,5 horas a partir de en 2025, sin tener en cuenta a todos los interlocutores social, hecho que va en contra del diálogo social y la negociación colectiva.
Tal como se puede ver en el artículo de primeros del mes de junio, de la revista 'Activa't de UPM', criticamos la deriva intervencionista que desde hace mucho tiempo se está viendo por el actual gobierno español, en el ámbito de las relaciones laborales modificando sustancialmente y de forma unilateral, con la única finalidad de cumplir con pactos políticos, cuyo espacio de negociación exclusivo y autónomo se han dotado tradicionalmente patronal y sindicatos.
Por todo ello, desde la UPM nos sumamos a las críticas realizadas desde Fomento, CEOE y CEPYME, entendiendo que las actuaciones que se pretenden por la actual Ministra de Trabajo, Yolada Díaz, van en contra del mandato del artículo 7 de la Constitución y la necesidad de diálogo social, con las consecuencias que se derivan para las empresas de nuestro sector, como se expresó por parte de la UPM en el artículo anteriormente mencionado, y que creemos no se están teniendo en cuenta. Más aún, cuando OIT ya ha dicho que no cumplen sus convenios y la OCDE le ha recordado que debe contar con los empresarios y el FMI cuestiona el recorte horario. La UPM considera que las formas de la Ministra, en ningún caso, valora los perjuicios para todas las empresas y trabajadores y trabajadoras y no son formas de actuar ni proceder en un país democrático.